Cristo Guerrillero- parte 1

Si bien la última pretensión que se le pueda achacar a este blog, es la de evangelizar. Sin embargo me parece muy importante resuperar en el seno de las conmemoraciones por el 68, los importantisimos sucesos de aquel emblematico año en la ciudad de Medellin Colombia. Esta entrega se hara en dos pa ser mas didacticos.
1968 es ser realista y pedir lo imposible, es tambien estudiantes gritando ¡Democracia, Libertad! en el oscuro Madrid Franquista, es romper con el establishment, desconfiar de los adultos, Paris entre barricadas, caidos en Tlatelolco pero por si fuera poco tambien se recupera al Jesucristo guerrillero, al de los pobres al de la igualdad. Se vuelven comunes en Iberoamerica los curas obreros y al inciar la misa en las colonias populares se advierte con tono festivo: "dios esta en la asamblea".
Para muchos esto puede sonar extraño, les puede sonar mas bien a una de vaqueros, ¿cómo esa iglesia cerrada, dogmatica, facista en muchas ocaciones puede mantener en su interior estas expresiones? Pues como quien dice ahi les va la de vaqueros.
Por alla al principio de los años sesentas al interior de la iglessia catolica apostolica y romana, se desataron una serie de cuestionamientos serios a la cerrazon y a las nuevas problematicas que presentaban las nuevas épocas, esto desemboco en el concilio vaticano II que se inicio en 1962, mismo donde un papa profundamento pregresista Paulo VI impulso importanes reformas a la iglesia de Pedro. Entre las ídeas que que flotaban en el aire, sobre todo entre los obispos latinoamericanos era la necesidad de volcar y recuperara a la iglesia para los pobre. Recuperando la palabra cristiana no como legitimador de poderes explotadores, si no como via de liberación para los oprimidos.Se volvia pues, vital enfrentar de manera real las problematicas cotidianas de la gente. Entre los resultados del concilio como ya lo dijimos hay una serie de expresiones de apertura y sobre todo el realce que debe tener el tema de los excluidos para una real vida cristiana.
El concilio no iba muy lejos, pero ya habia despertado la necesidad de muchos de revolucionar a la iglesia.
Los obispos Latinoamericanos se llevaron estas inquietudes y comenzaron a experimentar en sus comunidades nuevas formas, pero no tenian aún muy claro el rumbo. En México tenemos el claro ejemplo de Don Sergio Méndez Arceo, obispo de Cuernavaca y primer lider en México de lo que despues se llamaria la teología de la liberación. Esta hombre calvo y arropado sólo por una túnica de alguna forma fue el primer defensor de derechos humanos de nuestro país. Entre los experimentos que comenzo a hacer podemos resaltar el de poner en Psicoanalisis a todos los seminaristas del seminario de Morelos, o iniciar a hacer procesos de organización popular entre las comunidades rurales del mismo estado, esto desde luego levanto ampula y severas críticas entre los sectores más conservadores. En realidad en toda Iberoamerica se comenzaron a dar estas expresiones. Sin embargo el camino quedaria mas claro a partir de 1968 cuando en Medellin, Colombia se llevara a cabo la conferencia del Episcopado Latinoamericano y el dominico Peruano Gustavo Gutierez desarrollara la primer linéa de pensamiento teológica y filosófica propiamente Latinoamericana. En una siguiente entrega recordaremos propiamente lo que sucedio en Medellin.